Diario de un cocinero empedernido.

Sartén, cazuela y cocina junto al disco de Juan Luis Guerra = Comida perfecta y locura permanente e intransitoria.

Unos simples altavoces a todo volumen y con La travesía , la bilirrubina, la gua-gua , woman del callao y otras tantas canciones imprescindibles. Haciendo el ganso , un poco de sal , el fuego a tope y el sonido de las papas fritas reburbujeando en el oro líquido.......

Y de fondo.. :

-Como tú no hay en esta vida...

-como tú no hay ningunaaa!!!!!!!

Nnanananana oh noooooooooooo… yeyé (La Travesía.)

Bailando uno solo en la cocina con la gorra pa atrás y sin camiseta (por lo cerdo que es… ¿Quién será?..), pantalones cortos de fútbol, descalzo y regulando el pH del cuerpo con una , o mejor dicho unas cuantas jarras de nuestro zumo de cebada … una sensación inexplicable y uno se lo pasa teta.

Dejémonos de poetas y de filósofos, uno pasa de todo eso en cuanto suenan esas canciones, los pies se vuelven locos y los vecinos acabaran hasta los cojones… pero bueno , es lo que tiene este hombre y mi pasión por la cocina. =)


El miserable es una poetisa y un filósofo, en cambio yo soy un vividor, el puro placer es mi principio y fin , primero hacer y después pensar, en plan de ¿jodemos o barremos? sutil frase que da que pensar.

Concluyo esta mejunje entre la locura intransitoria y ese placer entre la música y esas serpientes con tacón.

Pd: “Si el placer es un pecado, bienvenido al infierno.”