Diario de un poeta borracho, pero…. Borracho de qué ¿?

Cuatro paredes blancas, el gotéele que parecen sombras incesantes causadas por nuestra morfina particular, camiseta de naranjito agujereada cual queso holandés, móvil y los cascos que revientan mis tímpanos escuchando una de las mejores canciones que puede escuchar uno para que llegue su inspiración.

Este es el mundo de los hombres, es lo que dice esa canción esa canción que te hace pensar o disfrutar. IT IS THE MANS WORLD, doy gracias por esa bendición a su creador, Seal.

Esta canción me recuerda a solo pensar en mí, pasar de los demás, vivir a mi manera con mi estilo de vida y mi incombustible chulería.

Este es el mundo de los hombres, el de la chulería, el del desenfreno, el de primero hacer y luego pensar, si que tenga aquí cabida sus consecuencias, el mundo de nuestro libido, de nuestro placer, de saciar siempre nuestra sed de ambición y de querer más y más , y de no querer salir nunca de entre sus dos piernas. Y entonces ya comprendí que curtí mi educación en el papel cuché y me diplome en el amor.

Ahora llega el momento de volver a ser así, de dejar de pensar en el qué dirán y volver (si alguna vez me fui) a ser un pequeño gran cabronazo en ciertos temas, pensar como antes, en disfrutar, disfrutar y volver a disfrutar, desfasar sin sentirte culpable al despertarte en una cama desconocida acompañado de curvas estrambóticas en las que cualquiera querría deslizarse, con ese estilo sutil de reina de carnaval que cosa puedo decir.

Y entonces me pierdo, nos perdemos con tanta fabula de la farándula, papeles donde va y reina el vil metal.

Serán sus tacones, mejor no hablar, pero una cosa está clara… Y es que por más que yo la quiero y aunque viviera tres vidas pendenciero y mujeriego seré hasta que me muera.

Y esto qué es ¿? : Diario de un poeta borracho, pero…. Borracho de qué ¿?

Hasta la próxima inspiración o dosis de mi morfina habitual.